Tribuna, firmada por María García de la Fuente, presidenta de APIA:
Hoy Día Mundial del Medio Ambiente no puede ser un día más. Ni siquiera un año más. Este cinco de junio, no es uno más. En los últimos tres meses hemos vivido una pandemia que nunca hubiéramos imaginado ni en el mejor de los libros de ciencia ficción. Miles de personas fallecidas, millones de afectados, decenas de millones confinados en sus casas…y mientras, la Naturaleza siguiendo su curso, de la mejor manera que sabe: con libertad.
Esta crisis, que indudablemente tiene un origen ambiental ha sido propiciada por los desmanes que los seres humanos hacemos todos los días y en todos los rincones del planeta. Lo dramático de esta situación es que ha sido real y provocada por la que se supone que es la especie más inteligente de la Tierra.
Hoy 5 de junio es preciso recapacitar y pararse a pensar sobre el origen de esta pandemia, con un único objetivo: no volver a cometer los mismos errores. Se conoce, de una manera avalada por la ciencia, el origen del coronavirus, y este no es otro que la sobreexplotación de la biodiversidad.
Que cada día la deforestación arrase cientos de hectáreas; que los mares se esquilmen por toneladas; que las industrias contaminantes sigan emitiendo gases de efecto invernadero o que nuestros hábitos de consumo no se hayan modificado, hacen que el equilibrio que mantiene la supervivencia del ser humano se incline hacia uno de los lados.
A estas alturas del año, y a pesar de la pandemia de estos últimos meses, ya hemos consumido los recursos naturales que teníamos para todo el 2020 y hemos superado la capacidad del planeta para reponerlos. Nos comemos cada doce meses 1,6 planetas, es decir, estamos viviendo de las rentas e hipotecando el futuro.
Sólo con ecosistemas sanos y una rica biodiversidad podremos evitar nuevas pandemias. Ya no sólo es cuestión de dejar de destruirlos si no que ha llegado el momento de reconstruir todos aquellos que hemos maltratado. Es el momento justo para recuperar nuestro patrimonio natural.
La Naturaleza es nuestra mejor vacuna, y aunque a veces se nos olvida, los humanos somos Naturaleza y dependemos de ella. Lo que respiramos, lo que comemos, con lo que nos vestimos y hasta el dinero con el que pagamos está hecho con materias primas que proceden de la Tierra.
Cuando en 1974 las Naciones Unidas decretaron que todos los 5 de junio serían el Día del Medio Ambiente, la sociedad era otra. Lo hábitos eran otros. La sensibilidad social era otra. Desde esa fecha hasta ahora muchas cosas han cambiado en nuestra forma de relacionarnos con nuestro entorno: existe una mayor concienciación social en pro de la Naturaleza; los movimientos sociales que tienen en su ADN los valores de la sostenibilidad y respeto a la biodiversidad se han multiplicado; la educación ambiental como base para la formación de futuros defensores de la convivencia respetuosa con el entorno, forman parte de los preceptos de la educación de nuestros hijos; los productos o servicios, que desde su concepción piensan “en verde” se han convertido en la quinta revolución industrial; que el futuro que nos espera está basado en los conceptos de sostenibilidad, respeto y concienciación es algo por lo que todos apostamos. Todo ello ha sido fruto de la propia evolución de la sociedad.
Pero no nos podemos parar ni ahora ni aquí, tenemos que seguir dando pasos y asumir como propia que la Hora de la Naturaleza ha llegado. Que apostar por la biodiversidad es hacerlo por un valor seguro.
Desde la Asociación de Periodistas de Información Ambiental, APIA, vamos a ayudar a comunicar que un futuro verde es el único posible. Hemos tomado partido por el planeta y no vamos a ser neutrales en la defensa del medio ambiente. Creemos a la ciencia. Creemos en los hechos y sabemos que la comunicación ayudará a conseguir un ecofuturo.
Desde esta tribuna y en un día tan especial para nosotros, pedimos, reclamamos a los directores, editores y redactores jefes que no miren para otro lado y que apuesten por la información ambiental en sus medios. Que vean la transversalidad de este tipo de informaciones. Que no sigan relegando estas noticias a breves. Que no sólo hablen o escriban cuando se produce una catástrofe.
Los medios deben aportar propuestas desde sus páginas, desde sus programas o desde sus pantallas y para ello deben empezar a crear su propia trayectoria ambiental. Deben apoyar al periodista que propone estos temas. Deben incentivar estos temas. Deben tener sus redacciones abiertas para recibir informaciones verdes. Tienen que tener una sección fija en sus periódicos, revistas, programas de radio o informativos de televisión o medios digitales, de temática ambiental. Apostar por una información verde de calidad les reportará nuevos lectores, oyentes o espectadores y les hará ser más influyentes sobre una sociedad que camina decididamente hacia la sostenibilidad.
Para que ciudadanos, empresas e instituciones sean conscientes de la importancia de una rica biodiversidad, los medios de comunicación tienen que hacer un esfuerzo por informar y explicar los vínculos entre la Naturaleza y la salud, y el bienestar, y el desarrollo, y la convivencia, y la paz, y la…
Por eso, en este Día del Medio Ambiente, desde APIA pedimos a los directores, editores y redactores jefe que apuesten por la Naturaleza y por la información ambiental, porque es la hora de la Naturaleza y es el momento de la información ambiental.